Gallina que come huevo, aunque le quemen el pico, solía decir Andrés Manuel López Obrador para establecer que los corruptos no enderezarán el camino y repetirán sus mañas como un patrón de conducta, por eso resulta incomprensible que hoy en los gobiernos que serían toda honradez y decoro haya personas con la corrupción tan arraigada.
Vaya tema, parecía que sería una estulticia más de un funcionario menor, una bravuconada de esas a las que nos tienen acostumbrados y resulta que está alcanzando otras dimensiones, hasta a personas del Gobierno del Estado y la Fiscalía de Justicia supuestamente autónoma habrán de salpicar.
Viene bien la frase de Abraham Lincoln “Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo”.
Ya se acerca el segundo informe de trabajo del Gobierno Municipal, en 15 días habrá de estar hablándole a los cajemenses Sergio Pablo Mariscal de que ha hecho en los distintos rubros de su administración, quienes le redactan el texto habrán de tener todavía muchos espacios en blanco, sobre todo en materia de combate a la corrupción y rendición de cuentas.
No hay por donde entrarle a ese tema sin que parezca una burla para los ciudadanos, no en la situación actual. ¿Cómo explicarle a los ciudadanos que este Gobierno Municipal se solapan actos perversión de tan grandes como inverosímiles?
Se ha trabajado en bacheo, alumbrado, rescate de espacios públicos y aunque hay un rezago importante la gente va a entender considerando el entorno, las obras de infraestructura se han detenido por el “elefante reumático y mañoso” que les heredaron, el magro desarrollo económico tiene también una explicación, ¿pero como justificar los actos de un supuesto servidor público que ha enlodado a toda la administración municipal y al partido del que emana?
Por más que la ceremonia se prepare como el kickoff del proyecto político del Alcalde, por más que ensaye la lectura de su mensaje en el teleprompter presidencial, si no se pone un alto al porrismo y a las vilezas, el informe habrá sido un evento más. En sus manos está empezar bien el último año.
Ojalá que Mariscal Alvarado tenga la voluntad y decisión de gobernar al interior de su equipo. Le está haciendo mucho daño cargar funcionarios que perciben el servicio público como el pasaporte al atraco y la impunidad a costa de lo que sea.
Hace días tuve la oportunidad de participar en una conversación a distancia con el Alcalde, le planteé que en su equipo hay personas que debido a su desempeño piden ser removidos, olvidé decir que no solo su resultado debía tomarse en cuenta, una buena parte de la comunidad cajemense desconfía de su gobierno por tener personas de esa clase como colaboradores, al final del día el desgaste es para el propio Mariscal Alvarado, no sería extraño que a la vuelta de unas semanas o meses sea un peso difícil de cargar en alguna competencia política.
Hoy por ejemplo, el tema central en la sesión de cabildo fue ese funcionario, en la mañanera de Amlo el mes pasado el funcionario “cabildeó” para destacar por encima del mismo Alcalde, más adelante, cuando Durazo se entreviste de forma seria con el Alcalde para ver sus alcances electorales analizarán los positivos y negativos. A ver cuánto le suma o le resta este tema.
En contratse, es digno de reconocerse lo que se pretende hacer en Bomberos, el latrocinio y pillaje permitido por lo menos en las tres ultimas administraciones parece estar llegando a su fin. Esa es la ruta, cerrarle el paso a la corrupción.
Poca memoria
Escuchar la forma en que interactúan algunos de los regidores de Morena con Rosendo Arrayales es penoso, su manera de expresarse exhibe su escasa capacidad de discernir, justifica en buena medida la situación que atravesamos como municipio.
Recomendable es que hicieran memoria sobre el activismo de cada uno de los integrantes de la “izquierda cajemense” que integra el Ayuntamiento y donde han estado digamos en los últimos 10 años.
Mientras Arrayales ha abrazado causas sociales, muchas de ellas sin publicidad, pero de gran valor para personas desamparadas y vulnerables, algunos de estos ediles no tenían (y siguen sin tenerlo) la capacidad de hacer algo de provecho por su comunidad.
Quizá la capacidad de retención es limitada para estos ediles de Morena, limitemos el ejercicio de hacer memoria a esta administración. Quienes dicen que no es facultad de cabildo opinar sobre el desempeño de funcionarios o servidores públicos, hace meses de forma iracunda y violentando el cabal proceso removieron a la comisaria de Cócorit. Pues no que muy derechos.
Que feo les falla a los secretarios del Ayuntamiento el conteo de votos, ahora le tocó el turno a Saúl Benítez, en la votación para ver si enviaban exhorto a la Gobernadora la votación fue seis a favor, seis en contra y siete abstenciones. O hubo un mal conteo o de plano tenemos regidores que no saben ni cuando levantar la mano.