CIUDAD OBREGÓN.- El dinero que el Gobierno de la República distribuirá a través del “Crédito a la palabra”, podría no llegar a quienes realmente lo necesitan, por la mecánica que siguió la autoridad federal cuando realizó el censo de Bienestar 2019.
Manuel Montaño Gutiérrez expuso que una gran parte de los ciudadanos que se dedican al ambulantaje de la ciudad, no fueron censados ya que las visitas domiciliarias de verificación se hicieron por las mañanas, cuando los vendedores se encontraban en labores en la calle.
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“Ese es nuestro temor, que el dinero no llegue a los que realmente lo necesitan, gente que dejó de plano la actividad que hacía y ahorita no tiene ni para comer”, declaró el vicepresidente de la Asociación de Comerciantes en Pequeño de Cajeme,
Según informó el Gobierno, la administración federal designará a las personas beneficiadas, en base al censo de bienestar que realizó el Gobierno en 2019 a cinco millones de peticionarios; el crédito será por 25 mil pesos y podrán recibirlo incluso quienes trabajan en la informalidad para hacerle frente al impacto económico del coronavirus.
Montaño Gutiérrez, dijo que de los 82 vendedores ambulantes que pertenecen a la asociación, algunos con 50 años de ejercicio de la actividad, actualmente solo siguen en funciones no más de ocho de venta de alimentos.
“Y son más los que venden alimentos y que entran en la categoría de esencial, pero muchos ya no se ponen, decidieron no ponerse ya porque no hay gente, no se vende, entonces ese dinero que les queda cómo lo van a gastar en cosas de su puesto si no se vende”, añadió.