CIUDAD OBREGÓN.- De errónea calificó el sacerdote mexicano, Alejandro Solalinde Guerra, reconocido por su lucha a favor de los derechos de los migrantes, la intención del Gobierno de la República de prohibir que indocumentados de Centroamérica viajen en el tren conocido como La Bestia.

Durante su visita a Ciudad Obregón este martes, Solalinde Guerra dijo que la medida no tendrá el efecto que las autoridades del Gobierno Federal presumen, que es reducir el número de muertes, víctimas del delito y violaciones a los derechos humanos de los migrantes.

Recordó que en 2005, el funcionamiento del tren estuvo suspendido por cerca de tres meses, después de que el huracán Stan destruyó 30 puentes y decenas de tramos de vías ferroviarias en Chiapas, lo que ocasionó que los migrantes centroamericanos caminaran a pie 400 kilómetros, incrementándose los casos de asaltos y violaciones a mujeres y menores de edad.

“Caminaban y llegaban con sus pies desechos, sin calzado, más asaltados, más violados”, comentó el sacerdote originario del Estado de México.

Lo que el Gobierno Federal realmente busca es que lo que viven los migrantes que atraviesan territorio mexicano en su intento por llegar a la frontera con Estados Unidos, sea menos visible.

“El gobierno no está solucionando un problema, solo hace que no sea visible, porque en un tren es más visible, en cambio si van a pie, no es notorio lo que les pasa” declaró.

Descartó que la intención de las autoridades de prohibir que migrantes viajen en La Bestia, sea una instrucción o recomendación dada por el gobierno de los Estados Unidos.

“He platicado con los dos últimos embajadores de Estados Unidos en México y tratando el tema en el Departamento de Estado y ellos les dicen qué pero no cómo, el cómo lo pone México y siempre ha sido en atropello a los derechos humanos”, declaró.

Por su labor, Solalinde Guerra ha recibo amenazas de grupos criminales de México que lucran con la situación de los migrantes con tráfico de personas, armas y órganos, por lo que recientemente tuvo que abandonar el país por un par de meses.

Previo a su participación en una conferencia que impartió ante alumnos de la Universidad Vizcaya, mencionó que Sonora es hoy para los migrantes una ruta alterna, ante la peligrosidad de la ruta del Golfo de México, controlada por el crimen organizado.